Por Mónica Papaianni
  
Después de haberse sancionado la Ley de Medios Audiovisuales, hace siete años, los que la sociedad esperaba era una gran apertura y pluralidad de voces. Los embates continuos del diario Clarín, dirigido por un asesino de lesa humanidad, como lo es Héctor Magneto, impidieron, año tras año su puesta en práctica. Este mecanismo corrosivo duró hasta la llegada de la oligarquía al poder, el 10 de diciembre pasado, momento en el cual se selló la comunicación unívoca de los medios hegemónicos, cercenando la impronta de un pueblo dispuesto a expresarse.

Quienes crearon la Coalición para una Radiodifusión Democrática, participaron también, en los Foros en todo el país, para que finalmente, Gabriel Mariotto la convierta en Proyecto de Ley, y los legisladores den su aprobación.

Una enorme labor en beneficio de la pluralidad de voces que quedó truncada, otro derecho paralizado y por supuesto, las repercusiones, no tardaron en llegar, dado a que habiendo manejado los medios, el gobierno de Cambiemos llevó la economía a su peor nivel, remató a la Argentina con el FMI y los fondos buitre, le dio el alta a la represión de la dictadura, vendió patrimonio del Estado para beneficio de sus funcionarios, despidió a cientos de miles de argentinos, los tarifazos, el brutal engaño a los jubilados, el quiebre presupuestario en Educación, Salud. Ejerció la corrupción en el más alto nivel y con todos sus funcionarios comprometidos entre otras… y, como si esta nómina resultara insuficiente, les sacó el plato de comida de la mesa a todos los argentinos. Pero de esto no se habla, porque tienen comprados a los grandes medios, que invisibilizan estas degradantes políticas que llevaron a cabo y en cambio ponen pantallas similares a las escenografías de Hollywood, en las cuales detrás no hay nada. Como por ejemplo las denuncias seriales en contra de la oposición, y enaltecer a fuerzas de seguridad caracterizadas por ser gatillo fácil, promoviendo la violencia en la sociedad argentina, emulando la tristemente célebre Ley del Oeste norteamericano.

Por estas y tantas razones más, la Ley de Medios Audiovisuales se puede considerar como una plataforma en donde se sustentan todos los derechos de todos los ciudadanos. Por eso fue lo primero que atacaron, por eso, es lo primero que debiéramos defender.

Hoy en La Oesterheld, Gabriel Mariotto y periodistas destacados darán charla abierta en referencia al séptimo aniversario de su sanción. Hotel Bauen de la Ciudad de Buenos Aires, Callao 360, a las 21 hs.

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