Por Mónica Papaianni

Tras un bombardeo de spots de campaña en todos los medios, se cerraron las campañas políticas en una Argentina que nada en la incertidumbre.

Así, hemos visto una enorme galería de sonrisas, acompañadas de promesas, caras de enojo y violentos pedidos democráticos a través de elementos contundentes, como lo es un garrote. En el mismo escenario, rotan de derecha a izquierda, las aventuradas propuestas de cambio con rumbo comprobablemente incierto, a un electorado saturado de información, que por otra parte, desconoce a los postulantes, en su mayoría.

En este marco se desarrollan los ejes de campaña. Y resulta interesante hacer un pequeño recorrido de lo actuado por las distintas fuerzas políticas, que compiten por una banca, en ambas cámaras.

En primera instancia, vemos que en el partido gobernante no salen a hablar los candidatos sino la gobernadora Vidal, quien fue la encargada de cerrar campaña y que, en su discurso lanzó la intención de perpetuarse en el poder, ya que sus palabras finales fueron “vinimos al gobierno para que Cambiemos sea para siempre”, algo que realmente puede preocupar a la mayoría de los argentinos.

Pero lo insólito es que Bullrich está blindado, no le permiten hablar, con lo cual, ¿qué puede esperar el pueblo argentino de este candidato? ¿Cómo piensa representar los intereses colectivos? ¿Va a representar los intereses colectivos?... Si nos guiamos por sus últimas declaraciones, sabemos que no, de ahí el blindaje.

Por otro lado y en la otra vereda, se presenta la izquierda por distintos frentes. Tenemos a un Nicolás Del Caño que sí habla y habla bien, y se lo ve muy preocupado por la economía (su fuerte), y dando debate en todos los medios posibles. Pero pocos saben que en las elecciones de 2015 promovió el voto en blanco y de esta manera favoreció de manera contundente para que ese punto y medio de diferencia fuera a las arcas de Macri y se quedara con la presidencia de la nación. Tampoco el común denominador sabe que Del Caño tiene un auto de alta gama marca Ford Mustang modelo 2017.

Pero hay otros frentes de izquierda, que encaran las propuestas con otros valores y otras perspectivas, y son necesarios en la vida política argentina. Ellos también se postulan y seguramente compartan los recintos en representación de un sector de la sociedad.

Hay paracaidistas como Biondini, Ivo Cuzzarida, César Arias, Romero Feris…….es interminable.

En esta franja podríamos sumar a Randazzo, pero decidimos darle unos párrafos aparte.

Después de casi dos años de desaparecer de la vida política, Randazzo sale de la galera, al mejor estilo del mago sin dientes, despliega una copiosa tirada de afiches, spots publicitarios de alto costo, y participaciones pagas en todos los canales, para venir a decir que él es quién cumplió. Tal vez, el haber cortado las cintas con la tijera de las obras que puso en marcha y ejecutó Cristina Kirchner le hizo pensar en que él mismo era el autor de esas obras. Así, habló de los DNI, de los trenes, de los pasaportes e innumerables innovaciones fruto de las políticas nacionales y populares que la ex mandataria realizó durante sus dos mandatos. Es concreto que no se dio por enterado que ser funcionario es ser empleado y no el propulsor de las políticas.

Pero así y todo, se candidateó, no pudiendo ocultar que su financiamiento proviene del multimedio Clarín, y que u única función en estas Legislativas es, como se dice en la jerga política “piantar votos”, en este caso, en beneficio de Macri.

En los frentes del peronismo, se juegan distintas opciones:

Massa, con un discurso moderado y claro apuntando, esta vez, a frenar a Macri, porque convengamos que le ha votado a Macri todas y cada una las leyes, con el justificativo de “ayudar a gobernar”. Lo acompaña Stolbizer, líder en denuncias falsas. Pero tiene a Mirtha Tundis, Daniel Arroyo, que son políticos claros y comprometidos.

Y llegamos a lo más puro del peronismo:

Unidad Ciudadana, encabezada por CFK, quién no tiene que hacer promesas, porque el pueblo argentino recuerda como vivía durante sus dos mandatos. Y NO HAY QUE AGREGAR MÁS NADA. Cristina encabeza todas las encuestas y cuenta con la mayor intención de voto.

Frente de Unidad Porteña

Filmus y Cerruti, de quienes ya tenemos en claro sus trayectorias en educación y en legislativas

Itahí Hagman, un dirigente de la izquierda con el peronismo, y

Honestidad y Coraje en la Ciudad de Buenos Aires

Lleva a diputados a Guillermo Moreno, el hombre que defendió la mesa de los argentinos durante su función en el gobierno. El hombre capaz de defender los intereses de los argentinos y ponerle un verdadero freno a Macri & cia. El hombre al que nadie puede endilgarle nada en su contra, ni siquiera Bonadío, experto en demandas apócrifas. Siguen a Guillermo Moreno Pimpi Colombo, la dirigente que desde hace 34 añoss viene defendiendo los intereses de las amas de casa, Gustavo Vera, Adrián Andreatta, médico, propulsor del plan Qunita, José Alvarez, en defensa del comercio y las pymes de CABA, Adriana Ghitia, decana de la facultad de comunicaciones de la UBA y Rubén Zampino, dirigente social. Un combo para la equidad en una ciudad que merece otro presente y otro destino.

0 Comentarios