Luego de la polémica por la demora en la carga de datos en las PASO de la Provincia, se reinstaló en el país el debate por el voto electrónico. Sin embargo, en la serie Scandal se demuestra su vulnerabilidad.

La demora en la carga de datos de las últimas PASO volvió a abrir la polémica sobre nuestra forma de votar. Desde el Gobierno nuevamente apuntan a establecer el voto electrónico para poder sumar votos, con la implementación de un software que cambia automáticamente al candidato elegido a otro de su partido, y es el manotazo de ahogado de Macri, que sabe perfectamente que pierde en todos los distritos y que solo es acompañado por el puñado de 26 a 27 % del total del electorado,

Scandal, que se puede ver en la tele por el canal FOX Life o Netflix, cuenta la historia de Olivia Pope, una ex directora de comunicaciones de la Casa Blanca que inicia su propia empresa de "gestión de crisis". Con el correr de la trama, se puede ver su pasado en el que trabajó como asesora de quien llegaría a ser el presidente de la nación más poderosa del planeta. Recién en la segunda temporada, se ve el delito informático en la ciudad de Defiance, que les permitió ganar el estado de Ohio, clave para la carrera electoral. El truco consistió en modificar el software de varias máquinas de votación para que arrojaran un resultado distinto a la voluntad de los electores. Así, el voto electrónico, impidió que se controlen los comicios y demostró la vulnerabilidad de todo sistema de conteo masivo.

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