El fiscal federal Federico Delgado denunció que puede terminar con
“un tiro” en su cabeza, o con cualquier otro tipo de represalia, por
haber investigado las cinco muertes por la ingesta de drogas sintéticas
durante la fiesta electrónica Time Warp, en Costa Salguero, en abril del
2016.
“Mi trabajo fue, como siempre, tratar de armar el caso y
presentárselo al juez. Sebastián Casanello nos dio la razón. Y por
alguna razón extraña nos tiraron por la ventana a Casanello y a mi, y yo
sufrí una serie de persecuciones que ahora terminan con la causa armada
y que puede terminar con un kilo de droga en mi auto, en una amenaza
más fuerte, en un tiro, no lo sé, porque el proceso de dos años se ha
ido agudizando”, comentó el funcionario judicial.
El lunes último, el juez federal Marcelo Martínez de Giorgi citó al
fiscal a indagatoria, tras acusarlo de haber difundido a los medios
información sensible del caso. Delgado había sido apartado de la causa
luego de ser recusado por dos de los imputados: el abogado Víctor
Stinfale y y del empresario Walter Santángelo.
Delgado también investigaba la causa Odebrecht, que involucra a Jorge
“Corcho” Rodríguez y
de la gestión de Cambiemos, entre ellos: Macri. También fue
denunciado por el juez Claudio Bonadio.
No es la primera vez que un magistrado federal avanza contra un
fiscal por un presunto delito menor. Claudio Bonadio ya había procesado,
semanas atrás, a los funcionarios del Ministerio Público Carlos Gonella
y Emilio Guerberoff, pero la Cámara Federal revocó la medida.
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