El 19 de agosto comienza el torneo de Primera División Por Francisco Arismendi
El recorrido conflictivo que viene transcurriendo el futbol hace semanas encontró un desenlace que deja expectativa. Las trasmisiones seguirán siendo abiertas, pero con un terreno preparado para un cambio en su estructura. Es posible tomar tres aristas que dejan libre la imaginación para convencerse de esto. En primer lugar, la carta en conjunto de los clubes pidiendo el fin de Futbol para Todos; por otro lado, la incipiente idea de un sentido común promovido que plantea la necesidad de otras emergencias sociales por sobre el futbol; por último, una comparación con el resto de los países donde las empresas privadas ya están dentro de la organización de las transmisiones de los partidos.
El último punto nos acerca a la empresa Turner. Al igual que en la mayoría de los países del mundo, la idea de que una empresa privada invierta en el futbol domestico poco a poco se va insertando. Ted Turner, empresario inversionista y magnate estadounidense de los medios, logró un acercamiento con el Comité de Regularización, encabezado por Armando Pérez, para formalizar la invitación hacia el futbol argentino a pertenecer a su gama de negocios.
Turner es una empresa que además de la operadora CNN, cuenta con contratos de patrocinio de varios deportes en el resto del mundo, el caso del futbol brasileño, y la NBA. El proyecto presenta un canal propio para la AFA, donde las acciones se repartirían entre el ente organizador del futbol argentino, la empresa Turner, y alguna supuesta empresa que acompañaría el negocio.
Los $300 millones que giraran desde la Secretaria General de la Presidencia, vinieron a poner paños fríos al problema de Futbol para Todos. El contrato vigente, donde se exige las transmisiones abiertas y gratuitas, tiene fecha hasta 2019 y tanto el presidente Macri (ya desde campaña) como sus colaboradores, se devastaron afirmando que se cumplirá el arreglo. Eso sí, afirmando que es un error que el Estado se haga cargo, y tirándole la pelota a los dirigentes de los clubes, remarcando sus malos manejos dentro de la economía devastada enmarcada por la corrupción. El dinero está, o al menos una parte. Y con eso alcanza para que el torneo de futbol comience, y de esa manera conseguir un respiro aún más grande, y con ello ganar tiempo que apacigüe las alteraciones y demandas. Quizás desde ahí, todo lo que hoy aparece como una incógnita se resuelva, y quien dice que hasta Messi tome la decisión de volver a la selección nacional.
El futbol en transición: FPT sigue pero con cambios a la vista
A casi veinte días del comienzo del torneo local, el gobierno destinó dinero para que los clubes se repartan y alivianen su situación económica
Con la bonificación que el gobierno hizo hacia la AFA, una suma de $300 millones, en su primer cuota, de los $1800 arreglados para asegurar el futbol televisado por 12 meses, generó un respiro en la problemática del Futbol para Todos. Sin embargo, la idea de que el poder del comercio del futbol pase a nuevas manos sigue vigente y cada vez gana más lugar.
El último punto nos acerca a la empresa Turner. Al igual que en la mayoría de los países del mundo, la idea de que una empresa privada invierta en el futbol domestico poco a poco se va insertando. Ted Turner, empresario inversionista y magnate estadounidense de los medios, logró un acercamiento con el Comité de Regularización, encabezado por Armando Pérez, para formalizar la invitación hacia el futbol argentino a pertenecer a su gama de negocios.
Turner es una empresa que además de la operadora CNN, cuenta con contratos de patrocinio de varios deportes en el resto del mundo, el caso del futbol brasileño, y la NBA. El proyecto presenta un canal propio para la AFA, donde las acciones se repartirían entre el ente organizador del futbol argentino, la empresa Turner, y alguna supuesta empresa que acompañaría el negocio.
Los $300 millones que giraran desde la Secretaria General de la Presidencia, vinieron a poner paños fríos al problema de Futbol para Todos. El contrato vigente, donde se exige las transmisiones abiertas y gratuitas, tiene fecha hasta 2019 y tanto el presidente Macri (ya desde campaña) como sus colaboradores, se devastaron afirmando que se cumplirá el arreglo. Eso sí, afirmando que es un error que el Estado se haga cargo, y tirándole la pelota a los dirigentes de los clubes, remarcando sus malos manejos dentro de la economía devastada enmarcada por la corrupción. El dinero está, o al menos una parte. Y con eso alcanza para que el torneo de futbol comience, y de esa manera conseguir un respiro aún más grande, y con ello ganar tiempo que apacigüe las alteraciones y demandas. Quizás desde ahí, todo lo que hoy aparece como una incógnita se resuelva, y quien dice que hasta Messi tome la decisión de volver a la selección nacional.
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