LOS ÚLTIMOS DÍAS DE MALCORRA EN CANCILLERÍA

“Está poco en Argentina” fue el “argumento” y en el enroque ponen a Prat Gay en el cargo
Malcorra vive viajando, estuvo esta semana en Egipto y Angola,miembros no permanentes del Consejo de Seguridad. El raid angoleño tiene un componente extra: ese país "vetó a la canciller en las preliminares y Malcorra intentó remontar esa pendiente. El campañismo, según la mirada macrista no es saludable para la política exterior pero se asume como parte de un acuerdo de la ministra con Macri. Fue Malcorra, en definitiva, quien logró la visita de Barack Obama y los elogios del saliente presidente de EE.UU., oro en polvo para el relato PRO de volver al mundo, a costa de la miseria colectiva de los argentinos.
 En el Gobierno se da por hecho la salida dela canciller. Si no llega a la cima de la ONU, lo cual, se sabe que es un imposible para ella, dadas las denuncias por encubrimiento a la pedofilia, ocuparía la sede de la entidad en Ginebra, otro de los paraísos fiscales y hay una ruleta más curiosa: que la derive hacia Madrid en lugar de Ramón Puerta, misionero y amigo histórico de Macri, que terminó en esa embajada aunque soñaba con París, como los integrantes de las familias patricias de hace 200 años, destino con el que está muy familiarizado, pero que se lo ganó Jorge Faurie por sus aportes durante la accidentada jura de Macri. Todo indica que lo único que gravita es el amiguismo y no la capacidad a la hora de ocupar cargos, y claramente, las consecuencias están a la vista y las paga el pueblo argentino.

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