En La Rural, el triunvirato de la CGT aceptó la reforma laboral
El pacto fue confirmado por el Ministerio de Trabajo y por uno de los triunviros de la central obrera.
El pacto fue confirmado por el Ministerio de Trabajo y por uno de los triunviros de la central obrera.
El comunicado de la cartera laboral y la justificación del sindicalista:
Tras una reunión en la sede que la Sociedad Rural tiene en el barrio porteño de Palermo, hubo acuerdo entre el Gobierno y la CGT para que el Poder Ejecutivo envíe al Congreso el proyecto oficialista de reforma laboral.
El triunviro de la central obrera Héctor Daer confirmó el pacto y justificó: "Se sacó el banco de horas y el cese tiene que ser regulado por cada convenio colectivo para el fondo".
El sindicalista tras salir del cónclave argumentó que "se dejó de lado lo que perjudicaba al 50% de los empleados de las PYMES".
"Los aportes patronales lo sacaron de la reforma laboral y lo pasaron a la reforma tributaria", anunció Daer y aseguró que "hoy 900 mil trabajadores están en relación de dependencia sin blanqueo hoy en la economía".
Por su parte, la cartera laboral que conduce Jorge Triaca publicó un comunicado.
“En el día de hoy se llevó a cabo una reunión entre el ministro de Trabajo y los miembros del Consejo Directivo de la CGT, en el marco de la IV Conferencia Mundial sobre la Erradicación sostenida del Trabajo Infantil. Tras la misma, y luego del trabajo en conjunto que viene llevándose adelante con los representantes de cada uno de los sectores, se alcanzó el nivel de consenso necesario para enviar el proyecto de ordenamiento laboral al Congreso de la Nación para su tratamiento en las próximas semanas”.
Lo que Triaca no agregó en el comunicado es el trabajo esclavo que ejercen infantes para los talleres de la mujer de Macri, como tampoco la cifra escandalosa de más de 1 millón y medio de trabajadores despedidos desde que Macri ingresó a la Rosada, y de los empleados públicos sumados al staff por ser del PRO, que duplican y en muchos casos triplican las plantas existentes, y con sueldos siderales, mientras despiden despiadadamente a trabajadores de otros signos políticos.
Flexibilización laboral es igual a trabajo esclavo, con el agravante que si no se es del PRO no se tiene trabajo, con lo cual es extorsión, persecución ideológica, censura a la libertad de expresión en toda su magnitud y un retroceso a principios del siglo XX. Los triunviros, de espaldas al pueblo acordaron la entrega para evitar ir presos por los carpetazos con los cuales los extorsiona Macri. Hubiese sido más digno renunciar, pero no lo hicieron, hubiese sido justo luchar, pero mostraron su alta cobardía y su pertenencia a la zona de confort.
Tras una reunión en la sede que la Sociedad Rural tiene en el barrio porteño de Palermo, hubo acuerdo entre el Gobierno y la CGT para que el Poder Ejecutivo envíe al Congreso el proyecto oficialista de reforma laboral.
El triunviro de la central obrera Héctor Daer confirmó el pacto y justificó: "Se sacó el banco de horas y el cese tiene que ser regulado por cada convenio colectivo para el fondo".
El sindicalista tras salir del cónclave argumentó que "se dejó de lado lo que perjudicaba al 50% de los empleados de las PYMES".
"Los aportes patronales lo sacaron de la reforma laboral y lo pasaron a la reforma tributaria", anunció Daer y aseguró que "hoy 900 mil trabajadores están en relación de dependencia sin blanqueo hoy en la economía".
Por su parte, la cartera laboral que conduce Jorge Triaca publicó un comunicado.
“En el día de hoy se llevó a cabo una reunión entre el ministro de Trabajo y los miembros del Consejo Directivo de la CGT, en el marco de la IV Conferencia Mundial sobre la Erradicación sostenida del Trabajo Infantil. Tras la misma, y luego del trabajo en conjunto que viene llevándose adelante con los representantes de cada uno de los sectores, se alcanzó el nivel de consenso necesario para enviar el proyecto de ordenamiento laboral al Congreso de la Nación para su tratamiento en las próximas semanas”.
Lo que Triaca no agregó en el comunicado es el trabajo esclavo que ejercen infantes para los talleres de la mujer de Macri, como tampoco la cifra escandalosa de más de 1 millón y medio de trabajadores despedidos desde que Macri ingresó a la Rosada, y de los empleados públicos sumados al staff por ser del PRO, que duplican y en muchos casos triplican las plantas existentes, y con sueldos siderales, mientras despiden despiadadamente a trabajadores de otros signos políticos.
Flexibilización laboral es igual a trabajo esclavo, con el agravante que si no se es del PRO no se tiene trabajo, con lo cual es extorsión, persecución ideológica, censura a la libertad de expresión en toda su magnitud y un retroceso a principios del siglo XX. Los triunviros, de espaldas al pueblo acordaron la entrega para evitar ir presos por los carpetazos con los cuales los extorsiona Macri. Hubiese sido más digno renunciar, pero no lo hicieron, hubiese sido justo luchar, pero mostraron su alta cobardía y su pertenencia a la zona de confort.
Lejos estamos de dirigentes sindicales de la talla de Ubaldini y cerca estamos de una revolución, cuando los bancos tenedores de los bonos sean estafados por este gobierno y se desquiten apropiándose del dinero de los ahorristas, como pasó en 2001, y volvamos al corralito. Entonces, y muy probablemente, la clase media entienda que para este gobierno ellos también son pobres y plebeyos y terminen por ubicarse del lado de los trabajadores, para finalmente construir sobre las ruinas. Aprender a través de los golpes lleva implícitas estas consecuencias.
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