Por Emilio López Muntaner
Varios senadores levantaron su mano y juraron por la Patria y los Santos Evangelios defender la Constitución nacional. Entre ellos, tres ex presidentes, todos electos en las Legislativas de octubre pasado.
Muchos de ellos, incluso un ex presidente, no lo hicieron solos, convocaron a sus familiares para la foto y la TV en el instante del juramento. Pero sin embargo, lo realmente significativo, y que por supuesto, no pasó desapercibido y que era lo que verdaderamente esperaba el pueblo profundo, era y fue el momento en el cual juró Cristina Kirchner.
CFK estaba tranquila, distendida y no necesitaba posar para la foto, las fotos eran para ella. Después, en su banca, su semblante descubría la iniciativa interior de comenzar a trabajar, a levantar su voz en nombre de los humildes, en nombre de los argentinos a los que les han quitado los derechos por decreto. Tal vez una de las pocas voces en la Cámara Alta con una posición firme, opositora, defendiendo los verdaderos derechos y que son contrarios al gobierno de Macri, quién solapadamente traslada al recinto de senadores proyectos de flexibilización laboral, previsional e impositiva.
Se prevé que cristina hablará como presidenta del bloque de unidad Ciudadana, la fuerza con la cual llegó al senado, representando a la provincia de buenos Aires, y ya ha manifestado públicamente que votará en contra de esta batería de leyes que lisa y llanamente van en contra de todos los argentinos.
Algo que no queda claro es que hará el bloque del PJ, comandado por el senador Pichetto, ante el primer desafío que tendrá el peronismo, y en sus diferentes expresiones , sobre tener que decidir defender a los trabajadores, a los jubilados, en definitiva, a los que nada tienen, o defender los intereses económicos de cada provincia que representan, con el “justificativo” de garantizar la estabilidad económica y la gobernabilidad de cada una, en el contexto nacional.
Paradoja para los senadores del PJ, ya que el fuerte apotegma de perón fue y es : “PRIMERO LA PATRIA, DESPUÉS EL MOVIMIENTO Y POR ÚLTIMO, LOS HOMBRES”, y la Patria es el pueblo en si mismo, no se puede desmembrar, Pero más allá de las firmas de los gobernadores a la iniciativa del Ejecutivo nacional, en la votación de estas leyes, serán los senadores peronistas quienes queden expuestos ante la historia y ante su pueblo, un pueblo que seguirá atentamente, por todos los medios, el debate y el momento en que cada uno levante o no su mano.
Si hay algo que los legisladores deberán recordar es, que sigue estando muy presente en la memoria colectiva del pueblo argentino, como y quienes votaron hace 20 años otras leyes, similares, y que tanto mal le causaron a la Argentina.
Para los que no lo recuerdan, esos fueron “los senadores de la Banelco” . Tal vez, la masiva movilización de hoy, con todo el movimiento obrero en la calle y organizaciones sociales sea una muestra y también un fuerte mensaje, a todos los que deban levantar la mano y el dedo, que este pueblo no tendrá tolerancia a estas tropelías como en esa nefasta época.
Emilio López Muntaner
Editor
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