Las palabras de Macri fueron para su Gabinete en el retiro
espiritual de Chapadmalal donde también pidió que sean todos "más
explicativos" con las medidas que se toman y que quienes tengan causas
se presenten en la Justicia. Aunque no quiere que la política se
transforme "en un partido de fútbol", ninguneó a la oposición y lanzó
que desde Cambiemos “hacemos trampa porque competimos contra la nada”.
Las fuertes palabras que Macri tuvo con su Gabinete
durante el "retiro espiritual", con 400 botellas de champagne de alto costo, pagado por el erario público, con el equipo de Cambiemos en Chapadmalal
durante el último fin de semana. Además de exigir una mayor eficiencia
en el trabajo y que se sometan a la Justicia, habló de la oposición y de
pelear un poco más con el círculo rojo. Hasta Clarín se le viene en contra.
“Es mentira que el Estado se tiene que ocupar de limpiarnos el culo”,
insistió Macri según reveló una alta fuente de Gobierno en
relación a quienes creen que "el Estado debe solucionar todo". En esa
línea Macri sostuvo que "una sociedad con valores de hincha de fútbol no tiene futuro” y cuestionó a sus propios votantes del 2015 al comentar que mucha de esa gente también "es ambivalente". Claramente usó con fraudulentos mensajes y estafa electoral a los ciudadanos y ahora, cuando todo se le revierte muestra su profundo desprecio y odio de clase hacia los trabajadores.
El reclamo de Macri fue insistente en uno de los puntos que más
reclaman los "lilitos" de la Coalición Cívica y los radicales PRO: “Tenemos
que ser más activos, tenemos que tener más presencia y hay que contar
con más voceros. Y también tenemos que discutir más con el círculo
rojo”.
Quienes ya trabajan fuertemente en la línea dura de Macri son la
gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal y la ministra de Desarrollo
nacional Carolina Stanley. Se espera que la mandataria de la Provincia
vaya en ese eje discursivo en la apertura de sesiones. Otra que está acabada.
“La gente mira el pequeño detalle. Seamos personas normales. ¿¿¿???No
hay otra manera de sobrevivir. Todo es una cuestión de equilibrio. Hay
que atacar y defender, como en el fútbol”, concluyó Mauricio
dejando de lado su enojo por futbolizar la política y motivando con
metáforas futbolísticas como en el vestuario de Boca o en los encuentros
con el actual DT Xeneize.
Es exactamente lo que Macri hace, atacar al pueblo argentino en todos los ordenes y después salir a defenderse con una sarta de incoherencias propias de su bajo nivel intelectual y cultural, que sumado a una inmoralidad absoluta, resulta un combo muy peligroso. Ya se lo vaticinaron, debe dejar la Rosada cuanto antes.
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