Cada vez que Diego habla, sus dichos generan importantes repercusiones por la magnitud de su figura a nivel nacional e internacional. Desde Dubai, "el Diego" analizó la realidad argentina y aseguró que Macri dejó "a los abuelos sin nada", además "no cumplió ni media promesa, los colegios siguen de paro. Después hablás con la gente y está lleno de caraduras, porque hoy ninguno lo votó. Vivir no se vive bien, mejorar no se mejoró nada". Y apretó el acelerador: "La gente está mal, no puede llegar a fin de mes y me hace mal que el Presidente en vez de ponerse a la altura del pueblo se ponga a la altura de Trump. Si en cualquier momento hasta sacan la bandera nuestra y ponen la yanqui".

Por eso, Maradona expresó su deseo de que CFK vuelva a gobernar el país: "Me gustaría que Cristina vuelva a ser presidenta, yo la apoyaría, sería lo más justo que puede haber, pero a los argentinos nos gusta escupir para arriba y que nos caiga en la cara", señaló a CNN en español.

Respecto a la crisis en Brasil y la orden de detener a Luiz Inácio Lula Da Silva por un departamento del cual nunca fue propietario, Maradona analizó que "el pueblo no puede soportar que a un tipo honesto como Lula ahora le digan que es el corrupto número uno. El traidor de Temer ahora es un juguetito de Donald Trump. Estamos viviendo momentos peligrosos: a Cuba y a Venezuela las quieren enganar, a Argentina ya la engañaron, a Paraguay lo mismo, les faltaba Brasil".

Sin embargo, evidenció la fortaleza del Gobierno chavista en Venezuela al afirmar que "Maduro está bárbaro, hablé con él ayer y lo veo fuerte, me dijo que me espera para festejar el campeonato (de su equipo dubaití) en Venezuela. Quiero pasar por Venezuela, por Brasil, quiero pasar por Nicaragua. Vivan todos los pueblos que no quieren ser dominados por el imperialismo".