Ni los cientos de miles de puestos de trabajo que se perdieron, ni los tarifazos que se conviertieron en la mayor tortura para el conjunto de la sociedad argentina, tampoco la quita de subsidios a discapacitados, el vaciamiento en la Salud, el desplome de la Educación, las brutales represiones, los crímenes impunes a civiles, y cientos de tropelías más, en una larga lista negra que situó y sumió a la Argentina como el último orejón del tarro en el concierto mundial de naciones, llego a ser tan certero como el dólar para que todo explote por los aires.
De esta manera, a horas de que se deban pagar 32 mil millones de dólares de Lebacs, el invento macrista para fugar capitales, y que representa el 70 % de las reservas de divisas en el BCRA, Macri. atrapado y sin salida exhibe su brutal incompetencia y no tiene mejor idea que llamar a Donald Trump para que le indique como tiene que gobernar la Argentina.
Bochorno que signa la pérdida total de soberanía y expone la inminente vuelta al colonialismo, algo que tanto el país del norte como el FMI, estaban esperando por más de una década, ganada para el pueblo y perdida para los detractores de siempre, los que hace más de 200 años viven de esta Nación y sus recursos, los que explotan para después llevar los dividendos, fruto de la tierra y del trabajo mancomunado del pueblo, a paraísos fiscales, donde hoy, los datos revelan que ya han fugado mas de 400 mil millones de dólares, los que les faltan a todos los argentinos.
El próximo viernes el FMI le dirá a Macri si hipoteca la nación Argentina, obviamente se toman toda la semana para elucubrar el gran saqueo y por cuantos años nos van a someter a sus cruentas reglas. En principio, ya pidieron la privatización del Banco Nación de la República Argentina y también la privatización del Banco Provincia de Buenos Aires. No se andan con chiquitas.
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