La CGT concreta este miércoles su quinto paro general en los tres años y medio que lleva Macri en el gobierno.
Junto con el creciente descontento por la crisis, también se estima un alto acatamiento, porque la medida de fuerza alcanza a medios
de transporte, escuelas, hospitales, comercios y bancos, entre otros.
La medida de fuerza no incluye movilización,
como sí la hubo durante la medida de fuerza a la que convocaron el 30
de abril las CTA y el Frente Sindical. Si se cuenta este paro, suman seis desde que Cambiemos llegó a
la Casa Rosada.
Este también es en rechazo a las políticas del Gobierno y cuenta con la adhesión de los gremios "combativos" de la CGT, que se alejaron de la cúpula, los de las tres vertientes de la Central de Trabajadores de Argentina, y los movimientos sociales.
"Las
imágenes van a mostrar la ciudad vacía porque los trabajadores en su
conjunto coinciden en las razones de la convocatoria a este paro",
pronostico el secretario General de Alimentación, Rodolfo Daer. A las 14:30 darán una conferencia de prensa.
Mientras
tanto, el Sindicato Único de Trabajadores de los Peajes y Afines
(SUTPA) confirmó que levantaron las barreras en una huelga que alcanzará
también a las plantas industriales metalúrgicas, automotrices, de
alimentación, textiles y calzado, mientras que se prevé una adhesión
dispar en locales comerciales y restaurantes, bares y cafeterías.
Por su parte, CTEP, Barrios de Pie y la Corriente Clasista y Combativa (CCC) instalaron desde este martes ollas populares en barrios del conurbano para manifestar su adhesión al paro y en el Obelisco.
A su vez, el Polo Obrero y el Frente de Lucha Piquetero realizaron cortes desde las 7 en el puente Pueyrredón, en el de La Noria, en
Panamericana, Acceso Oeste y en la avenida 9 de Julio y Corrientes. Y se sumarán a los sindicatos "clasistas", entre ellos Sutna
(neumático), la Unión Ferroviaria oeste, Cicop (Profesionales de la
salud) y ceramistas de Neuquén, para un acto cerca del Obelisco.
Puente Pueyrredón: Prefectura tiró gas pimienta y balas de goma contra los manifestantes
Los manifestantes
estaban por prender unas gomas en el lugar cuando fueron interceptados
por la fuerza de seguridad. Una mujer recibió siete disparos en su
pierna.
Pocas
horas después de que comenzara la manifestación en el Puente Pueyrredón
de los grupos de izquierda, la Prefectura comenzó a tirar gases lacrimógenos y balas de goma para dispersar a los manifestantes.
Una de las manifestantes heridas, Mari Medina, es la encargada de un comedor popular en un barrio humilde de la provincia de Buenos Aires. "Vengo para que se dejen de mirar para otro lado. Los pibes no tienen para comer, ya no nos alcanza", dijo.
Pero la represión se puso en marcha: Tal
como dijo Patricia Bullrich en declaraciones radiales, las fuerzas de
seguridad tienen la obligación de mantener liberada la zona. La
ministra de Seguridad aseguró que el Gobierno "no va a permtir" el corte de puentes
y no descarta la intervención de las fuerzas federales de seguridad que
ya están apostadas en los principales accesos a la Capital Federal en
este miércoles en el que se desarrolla el Paro Nacional convocado por la
CGT.
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