Papelón internacional: dejaron sin internet a los periodistas del mundo que cubren el G20
Más de 2000 trabajadores de prensa de todo el globo estaban presentes en
Parque Norte, el lugar elegido por la organización para que realicen sus
tareas. Así se quejaron por la caída del WI FI.
La Cumbre del G20 en Buenos Aires siguió sumando desprolijidades, también con los periodistas.
Los trabajadores de prensa de todo el mundo que vinieron a cubrir el
evento mundial fueron ubicados en Parque Norte, pero los dejaron sin
internet.
El Centro Internacional de Prensa (IMC por suis siglas en inglés) se quedó sin wi fi, complicando el trabajo de periodistas. Hubo quejas hasta del enviado de la BBC, que lanzó una polémica encuesta sobre la organización.
Aseguran que el corte de Internet se debió a que hubo medios que
conectaron dos o más cables en una misma mochila de transmisión
inalámbrica 4G, por lo que se interrumpió la conexión WI-FI.
Ante esto, la
organización informó que "queda terminantemente prohibido conectar más
de un cable a una misma mochila de transmisión inalámbrica 4G", y que
"personal de seguridad controlará el cumplimiento de la normativa". Un absurdo total.
Reunión Macri - Reino Unido: sin "soberanía" por Malvinas y sólo mención al vuelo "Falklands - San Pablo vía Córdoba"
Durante una de las pausas de la cumbre, el líder PRO tuvo sus 15
minutos de bilateral con Theresa May, pero sólo consiguió un fracaso en
cuanto al tema Malvinas. Aunque estaba previsto que se abordara la
cuestión de la disputa de soberanía, "la nueva Dama de Hierro" ganó y
sólo se limitó a agradecer el segundo vuelo continental a las islas, a
las que llamó según su nombre inglés.
En un nuevo episodio de la novela de política de deshielo que busca implementar Cambiemos con el Reino Unido, el
presidente Mauricio Macri aprovechó el G20 y se reunió durante 15
minutos en el predio de Costa Salguero con la primera ministra
británica, Theresa May, pero no consiguió absolutamente ni un solo gesto
respecto de la disputa por la soberanía de las Islas Malvinas.
De hecho, casi no consiguió hablar con "la nueva Dama de Hierro" acerca de la controversia por las Islas, porque, según
hizo trascender el Gobierno para intentar bajar el precio al fracaso, Macri prefirió "centrarse en las coincidencias". Curiosamente, sí estaba previsto abordar la temática de la soberanía de Malvinas.
Sin embargo, el gobierno británico difundió una
declaración en la tocó el tema Malvinas, pero con el nombre que los
ocupadores usan para las islas: sólo dio la "bienvenida" a un nuevo
vuelo entre el continente y las "Falklands".
"Los líderes le dieron la bienvenida a una nueva conexión aérea entre Falklands y San Pablo vía Córdoba,
algo que demuestra el significativo progreso que se está construyendo
en nuestra relación", sostuvieron desde el lado de May, en el marco del
encuentro bilateral que se llevó a cabo en una sala especial durante un
parate en las deliberaciones del G20.
Fue la primera vez, desde el conflicto del Atlántico Sur, que un jefe
de Estado argentino recibe en el país a un gobernante de la potencia que
mantiene ocupadas las islas. Este hecho, según la comunicación
presidencial, fue el único hecho por el cual Macri hizo alusión a las
islas.
Faurie, pendiente de juicio político, definió la reunión como una "conversación hecha con
franqueza en un clima positivo, que marca el nivel de relación que ha logrado después de tres años de gobierno".
Del mismo bando....
Tras negarlo, el Gobierno reconoció que Macri busca reunirse con el príncipe saudí acusado de matar a un periodista.
A pesar de que el jueves Marcos Peña negó un encuentro entre Mohammed
bin Salman y el mandatario argentino e incluso pidió "esclarecer" el
asesinato y descuartizamiento del que se acusa al heredero saudí, ahora
el canciller argentino retrocedió y admitió que mañana "podría haber"
una bilateral. Qué quiere el Ejecutivo de Cambiemos.
Los problemas de coordinación, a cargo de Hernán Lombardi, se suceden unos a otros en el G20 tan esperado por la administración Cambiemos. A la llegada tarde de Gabriela Michetti para la llegada de Emmanuel Macron, el corte de luz en el CCK cuando Nicolás Dujovne pedía inversiones a la banca mundial y el plantón de Donald Trump a en pleno escenario, entre otros "problemas" que se sucedieron, se
agregó la insólita contradicción en un margen de 24 horas entre Marcos
Peña y Jorge Faurie entre un posible encuentro entre el líder PRO y el
polémico príncipe de Arabia Saudita acusado de haber ordenado el
asesinato y descuartizamiento de un periodista.
El jefe de Gabinete aseguró que "no estaba prevista" una reunión privada entre Mohammed bin Salman,
el príncipe con pedido de detención en la justicia argentina, y Macri.
Incluso, Peña fue por más y hasta se animó a hablar de la necesidad de "esclarecer qué es lo que ha pasado"
sobre el crimen en Estambul, es decir las acusaciones que pesan sobre
el heredero saudita de haber sido el autor intelectual del asesinato y
descuartizamiento del periodista disidente Jamal Khashoggi.
SIn embargo, hoy Jorge Faurie confesó que el
Gobierno busca concretar una reunión bilateral entre Argetina y Arabia
Saudita para este sábado, cuya confirmación depende de la agenda que
ambos manejan para otros encuentros con mandatarios extranjeros.
"Entiendo que mañana podría haber un diálogo entre el príncipe
heredero y nuestro presidente en función de los horarios que ambos
tienen para las bilaterales", explicó Faurie a la prensa.
Es que el escándalo por el pedido de detención de la ONG Human Rights
Watch a la justicia nacional por el crimen del periodista y otras
presuntas violaciones a los DDHH generó que la agenda del príncipe haya
sido analizada al detalle y causado repercusión con cada alta y baja.
Por eso, su
"paternalista" conversación con Macron llamaron la atención del mundo.
¿Por qué el cambio de postura del Ejecutivo de Macri? Dólares y comercio.
Faurie, antes del cambio público respecto de las palabras de Peña,
reveló que se reunió con su homólogo saudita, quien estuvo acompañado de
los titulares de Comercio y Energía de su país.
Ahora, cuanto costó el G 20 ?
La organización del G20 no es gratuita y todos los gastos de la
recepción de las 26 comitivas corren por parte del anfitrión. En este
caso, Argentina erogó, según los datos informados por el Gabinete de la
Nación, unos 112 millones de dólares (4.368 millones de pesos).
La
cifra, a pesar de que desde el Gobierno manifestaron que se trata de
una cumbre "austera", supera en 22 millones a lo gastado por Alemania en
la edición de 2017.
El reparto del dinero se divide en cuatro
grandes ítem: 40 millones en protocolo e infraestructura
-servicios de catering, cena en el Teatro Colón, traslados, obsequios
oficiales a las delegaciones y limpieza-; 43, en equipar a las fuerzas
de seguridad; 17, en las reuniones previas; y 12, en salarios de las 70
personas que conforman la unidad técnica del G20.
Resultados y beneficios para la Argentina: 0
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