La AFI de Macri: empresarios y custodios de futbolistas contratados como espías y el polígrafo para preguntas sexuales
Tras conocerse que el 60% de los agentes fue designado durante los años
de Macri y Arribas y que el 70% de esas designaciones fueron post PASO,
ahora se reveló que entre los contratados PRO hay ejecutivos, custodios
de futbolistas y ñoquis. El caso del detector de mentiras para pregunta
sexuales, principalmente a mujeres, y los entrenamientos "tortura" a
espías.
El tamaño y la profundidad del raíd delictivo que hicieron Macri y su amigo "tramposo" Gustavo Arribas
en la Agencia Federal de Inteligencia no toca aún su "fondo" como para
poder dimensionarlo en su totalidad. Es que, tras difundirse el
descontrol de contrataciones de agentes que realizó Cambiemos durante
sus cuatro años de gestión, ahora se conoció que
la interventora del organismo, Cristina Caamaño, encontró allí un
variopinto e insólito cuadro de personas que el macrismo seleccionó como
espías: empresarios, custodios de futbolistas, parientes y ñoquis
fueron designados como agentes de inteligencia.
Hace dos días se publicó que sobre los 1405 agentes que aparecen en la
nómina de personal de la ex Side, 845 fueron nombrados durante el
macrismo. Es decir, el 60%. Además, el 70% de todas esas designaciones
se hicieron entre las PASO y las elecciones generales de octubre con
contratos de planta permanente, lo cual grafica un panorama de que la
administración saliente buscaba atornillar a los nuevos espías. Por si
eso fuera poco, Antes Arribas y la "señora 8", Silvia Majdalani, habían
echado a casi 500 agentes.
El 40% restante del personal está en el ente de inteligencia desde el
regreso de la democracia, es decir, desde un lapso de 32 años (si se
cuenta hasta la llegada del líder del PRO a la Casa Rosada), que se
extiende desde principios de 1983 hasta finales de 2015.
Ahora, aparentemente, los "castings"
para la inteligencia nacional que hacían Arribas y Majdalani no eran
muy precisos ni profesionales: una de las particularidades de
algunas de las personas que contrató la gestión anterior es que
provenían de empresas, como por ejemplo la firma de seguros Metlife, y
otros eran acompañantes o custodios de futbolistas.
Esto último, meter en la AFI a gente del ambiente del fútbol, que nada
tiene que ver con la inteligencia, no sorprende si se tiene en cuenta
que el escribano Arribas, el amigo de Macri seleccionado
por su afición a las "trampas", se dedicaba -y seguramente ahora vuelva a
esa actividad- a la compra-venta de jugadores y otros negocios de esta
actividad.
Asimismo, la publicación sostiene que Arribas y Majdalani incluyeron en sus espías designados a familiares. “Había, ahora ya no quedan tantos, familiares o parientes cercanos de Arribas y Majdalani. Algunos quedan aún”, señalaron quienes están al tanto de cómo avanza la intervención.
EL POLÍGRAFO PARA PREGUNTAS SEXUALES, LOS ENTRENAMIENTOS-TORTURA Y EL ESPIONAJE INTERNO
El mismo medio reveló que el equipo de la intervención encontró en la AFI “instrumentos” como el polígrafo LX5000 de la empresa Lafayette Instrument. Se trata de una especie de detector de mentiras comprado durante la gestión macrista y utlizado durante ese mismo período.
“Se usaron entre 2 y 3 veces y todos los empleados pasaron por el
polígrafo menos los directores”, expresaron desde el organismo, según la
misma publicación. El aparato "detecta" las mentiras a partir de la
medición de la frecuencia cardíaca y respiratoria y la presión
sanguínea, entre otras cuestiones. Si esos indicadores se modifican de
manera no habitual ante una pregunta puntual, eso revela la ausencia de
verdad.
¿Qué hacía Arribas con estos aparatos? Su
gestión los usaba para hacer pregunta sexuales, principalmente a las
mujeres. En el caso de los hombres, las fuentes consultadas revelaron
que les preguntaban “si engañaban a sus mujeres o si les gustaban
determinadas cosas de contenido sexual”. La interventora Caamaño dio de
baja ese dispositivo.
En esa línea, hubo comentarios sobre otro tipo de maltratos por parte de entrenadores. Por ejemplo, tirarle gas pimienta en los ojos a los entrenados.
“Debe haber entrenamiento de seguimiento, tiro, pero hacer eso es irse
de tema, es prácticamente una metodología de tortura”, indicaron desde
el staff que acompaña a Caamaño.
Otro elemento que surgió de la revisión que está haciendo la nueva
gestión, que en principio se extendería por seis meses pero que podrían
ser extendidos, también se desnudaron indicios de que la AFI podría
haber practicado el espionaje interno, a través de la infiltración en
una marcha de docentes.
Son toda gente de Boca Juniors. Esa era la cueva de delincuentes. Ah..! Y no se olviden que llegaron a la ciudad por los muertos de Cromagnon.
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