Luego de que un grupo de alumnos de entre 10 y 11 años fuese encontrado con envoltorios que contenían cocaína, listos para distribuir dentro de una institución educativa de la localidad entrerriana de Paraná, un estudio alertó sobre este fenómeno lamentable, con alrededor de 15 mil estudiantes que comercializan drogas dentro de escuelas y que tienen como destinatarios a sus propios compañeros, en el marco de una modalidad que utilizan las bandas de narcotraficantes para hacer "negocios" con absoluta impunidad.
El presidente de la Asociación Antidrogas de
la República Argentina (AARA), Claudio Izaguirre, dijo que debe
analizarse la venta de drogas en las escuelas.
Así lo manifestó el presidente de la Asociación Antidrogas de la República Argentina (AARA), Claudio Izaguirre, en torno a la comercialización de sustancias ilícitas en las escuelas y afirmó que Argentina va "a tender cada vez más a este tipo de actividades".
"En primer lugar, tenemos que mirar la venta de drogas en jóvenes y niños como un fenómeno interesante de ser analizado", dijo. Los narcos "empezaron a utilizar a los más chiquitos de diez, 12 o 14 años, para hacer los envoltorios de las sustancias que iban hacia la venta minorista. Cada uno de estos chicos estaba ganando entre cinco mil y siete mil pesos diarios, no hay sistema alguno que pueda suplantar lo que termina ganando un pibe de estos envolviendo drogas", continuó Izaguirre.
"Imaginemos lo que se puede ganar comercializando estas drogas en el ámbito escolar, por lo tanto, se hace muy difícil que el Estado pueda proponer algún tipo de actividad que les permita a estos chicos de tan corta edad poder ganar semejante cantidad de dinero", explicó el titular de AARA.
Sacar la droga del colegio
"Lo que debería hacerse es sacar la droga del colegio, de esa manera no existiría esta actividad, entonces así se puede llevar a los chicos al sistema educativo y después al laboral mediante el aprendizaje de algún oficio. Mientras el Estado permita el desarrollo de esta actividad, la situación de estos chicos va a seguir siendo la misma: el enorme deseo de tener mucha plata, de llevar en algún momento un revolver en la cintura, la posibilidad de estar soportando económicamente a toda una familia con una madre que recibe sobre la mesa todos los días entre cinco mil y siete mil pesos, lo que lleva a que esa madre proteja a ese hijo de todas las maneras posibles. Esta es la realidad que vivimos hoy en una república que está planteada para que el narcotráfico prospere".
"Cuando hablamos de vendedores de drogas menores de edad, muchas veces estamos hablando de chicos que son hijos de vendedores de drogas. No es verdad que la gente no trabaja, trabajan, pero en el ámbito de la ilegalidad y esto hace que toda la familia se referencie con esta actividad como una cuestión normal, común y que tiene que ver con la manutención", agregó el especialista en diálogo con Diario Popular.
Una realidad creciente en todo el país
Asimismo, Claudio Izaguirre explicó que "la vida de la república va a tender cada vez más a este tipo de actividades y tenemos estas cosas diseminadas en todo el territorio nacional".
"Lo que nos muestra Paraná es una realidad que debemos abordar porque es algo que está sucediendo en todas las escuelas del país -añadió-. Hay alguien que se encarga de la comercialización de drogas con el disimulo por parte de las autoridades de la escuela que, si bien se dan cuenta de lo que ocurre, tienen la orden de no mover un dedo en este tipo de cuestiones. Digamos que estamos visiblemente complicados".
Bajo esta línea, el presidente de la AARA aseveró: "La ‘ventaja’ que tienen en la venta de drogas en manos de una criatura tiene que ver con la falta de alcance del Poder Judicial sobre esa criatura, la falta de llegada de la Justicia o la Policía que no los puede tocar por la legislación que protege al niño, niña y adolescente".
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