La Casa Blanca advirtió que las Fuerzas Armadas estarían considerando, inclusive, acabar con unidades enteras que evalúan deponer las armas.
Estados Unidos denunció que Rusia está ejecutando a los soldados que se niegan a luchar en Ucrania tras las “significativas” pérdidas que Moscú ha sufrido en el campo de batalla en el último tiempo.
El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, dijo este jueves tener “información de que el ejército ruso ha estado ejecutando a soldados que se niegan a seguir sus órdenes” y que, inclusive, cuentan con datos que sugieren que “comandantes rusos están amenazando con ejecutar unidades enteras si intentan retirarse del fuego de artillería ucraniano”.
Kirby se negó a dar detalles sobre estas muertes o los métodos por los que el Pentágono llegó a la información pero sí dejó en claro la condena del país a estas acciones. “No me sorprende que las fuerzas rusas tengan una moral baja. Sufren de baja moral”, sentenció.
Por su parte, días atrás, Ucrania había agradecido a todos los rusos que deciden deponer las armas y sumarse a sus filas para ayudar a “limpiar” al país de los “invasores”.
“Algunos de esos ciudadanos, que ya son ‘ex rusos’ y rechazaron el pasaporte ruso, están luchando como parte de unidades que, junto a las fuerzas de seguridad y defensa de Ucrania, están limpiando nuestra tierra de los invasores rusos”, destacó el responsable de Inteligencia del Ministerio de Defensa, Andrei Yusov.
“Aquellos que voluntariamente se pasaron al lado de Ucrania son ciudadanos libres. Algunos de ellos expresaron el deseo de ser intercambiados, otros se han rendido”, agregó.
A la par, el portavoz del Ejército ucraniano, Volodimir Fitio, cifró en las últimas horas en aproximadamente 100.000 los efectivos desplegados por las Fuerzas Armadas de Moscú en el eje Limán-Kupyansk, la principal línea de combates en el noreste del país.
En esta zona, fronteriza con la región de Lugansk, anexada por Rusia hace más de un año, se desarrollan algunos de los combates más activos, con bombardeos constantes y decenas de intentos de asalto terrestre.
Sin embargo, en las últimas horas, Ucrania ha logrado “eliminar” a unos 200 soldados rusos en el área. “El enemigo no ha logrado aquí ningún éxito estratégico”, celebró Fitio aunque reconoció que estas bajas podrían verse sustituidas por nuevos oficiales captados en las últimas rondas de reclutamiento.
“Tienen suficientes tropas para lanzar operaciones distintas en diferentes secciones del frente”, dijo por su parte Yusov.
En el último tiempo, Rusia ha intensificado sus ofensivas en las inmediaciones de la ciudad de Avdeevka, en la región oriental de Donetsk, y en la ciudad nororiental de Kupyansk, con el objetivo de avanzar sobre la línea del frente antes del invierno.
La primera podría ser una batalla clave en la contraofensiva de Ucrania ya que sería el último intento de Moscú por dominar este frente.
Esta estrategia, sin embargo, ya le ha costado un alto precio al Kremlin, que se tradujo en “pérdidas significativas” de “miles” de soldados y unos 125 vehículos blindados.
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