El Kremlin condenó a siete años de cárcel a un ruso que se opone a la ofensiva contra Ucrania

De acuerdo con la ONG Memorial, Mijail Kriger proclamó poco antes de la sentencia que el presidente ruso, Vladimir Putin, era el “terrorista mundial número uno. 

Un ruso que se opone a la ofensiva de Rusia contra Ucrania, Mijail Kriger, fue condenado en apelación a siete años de cárcel, informaron varias oenegés, en un contexto de represión de voces críticas con el Kremlin.

Según la oenegé Memorial, Kriger proclamó poco antes de la sentencia que el presidente ruso, Vladimir Putin, era el “terrorista mundial nº1″ y gritó “¡Gloria a Ucrania!”.

Detenido en noviembre de 2022, el acusado había sido condenado en mayo a 7 años de prisión por “apología del terrorismo” e “incitación pública al extremismo”, por haber escrito en Facebook, antes de la ofensiva de febrero de 2022, que deseaba ver a Putin ahorcado.

Estos mensajes, según la acusación, justificaban también un atentado cometido contra la antena de los servicios de seguridad rusos (FSB) en Arcángel (noroeste) en 2018, y otro realizado en 2019 contra la sede de los FSB en Moscú.

Sin embargo, el interesado afirmó durante su proceso, en mayo, que esos mensajes habían sido utilizados como “pretexto” para castigar su militancia “antiguerra” y “proucraniana”, y reiteró que espera ver ahorcado a Putin, como “otros criminales de guerra”.

El martes, una corte de apelación militar de la ciudad de Balashija, en la región de Moscú, mantuvo su condena y la pena de siete años de prisión firme pronunciada en primera instancia, anunciaron Memorial y OVD-Info, oenegés especializadas en el seguimiento de la represión política.

La campaña de represión de las autoridades rusas, iniciada hace años, se acentuó tras el asalto contra Ucrania en febrero de 2022.

Casi todos los opositores destacados fueron encarcelados o forzados a exiliarse y miles de rusos han sido procesados por manifestar su desacuerdo con el Kremlin.

Según Memorial, en el país hay actualmente por lo menos 634 presos políticos.

Entretanto, el ejército ruso echa el resto en las afueras de Donetsk, donde intenta rodear por todos los medios a las fuerzas ucranianas en la localidad de Avdivka, en una de las batallas más importantes de esta guerra.

“Es una batalla clave en esta guerra. Ha habido muchas, pero creo que esta es una de las más importantes. A mi manera de ver, es el último intento de Rusia de hacerse con la iniciativa en el frente”, dijo Mijailo Podoliak, asesor de la Oficina del Presidente de Ucrania, a la agencia UNIAN.

La “defensa activa”, como la definió el presidente ruso, Vladímir Putin, se ha convertido en Avdivka en una ofensiva general, que por el momento no ha podido superar las fortificaciones construidas por los ucranianos durante los últimos ocho años.

La llegada del otoño, acompañada de lluvia y humedad, dificulta el avance de las brigadas motorizadas, lo que facilita la labor defensiva de los ucranianos en Donetsk, por lo que el tiempo corre en contra de los rusos.